Seguridad Marítimo-Portuaria en América Latina
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14/05/2024 | 5min de lectura aprox. | Logística Internacional
Seguridad Marítimo-Portuaria en América Latina: Oportunidades de mejora y estrategias ante amenazas
Abogado destaca la importancia de evaluar el desarrollo de mejores prácticas en esta materia
En el sector marítimo las amenazas son variadas, constantes y globales. Una de las más evidentes es la piratería frente a la costa de Somalia, con múltiples casos sufridos por buques que navegan en la ruta Asia-Europa. A esto se ha sumado la acción de los rebeldes hutíes de Yemen en el Mar Rojo, que entre sus ataques cuentan el emprendido contra el buque “Rubymar”, supuestamente asociado con intereses israelíes. La nave que, a la postre resultó hundida, transportaba fertilizantes y otros componentes altamente tóxicos que generaron problemas de contaminación en el área, comenta Javier Franco, director del Observatorio de Logística en la Universidad Externado de Colombia y socio en Franco & Abogados.
Añade que los problemas de seguridad en el Mar Rojo tienen un impacto significativo en la industria marítima global, al obligar a los buques a navegar alrededor África a través del Cabo de Buena Esperanza en lugar de utilizar el Canal de Suez en su ruta acostumbrada hacia Europa. “Se trata de eventos que, aunque alejados geográficamente tarde o temprano tendrán un impacto en América Latina, según han advertido especialistas del sector como Lars Jensen”, apunta el abogado.
Otro flagelo que enfrenta el sector marítimo- agrega- es el narcotráfico, negocio ilícito que recurre cada vez más a “creativas” estrategias para ocultar las sustancias ilegales en los buques mercantes, ya sea en su estructura o compartimentos, en espacios de carga, o en equipos. “Una técnica– sofisticada por demás– pero muy común actualmente es la de adherir dispositivos, conocidos como ‘parásitos’ o ‘torpedos’, al casco del buque bajo la línea de flotación para evitar su detección por parte de las autoridades. También existen otras modalidades como subir paquetes con sustancias prohibidas por el costado de mar del buque mientras éste se encuentra en la instalación portuaria o efectuando maniobra de zarpe”, apunta.
Según el abogado, estas prácticas evidencian la constante evolución de las estrategias de los narcotraficantes que representan una amenaza persistente para el sector. Por ello, propone que “la lucha contra este flagelo requiere un enfoque integral y colaborativo para ser abordado de manera efectiva”.
Adicionalmente, expone, el sector enfrenta amenazas como el contrabando, el tráfico ilegal de personas y de armas, las que indica “requieren una atención urgente y coordinada por parte de los diferentes países con apoyo en las entidades internacionales”.
Pero al margen de actos terroristas o a delitos, el transporte marítimo enfrenta riesgos de diversas fuentes. Un ejemplo reciente de riesgos asociados a la navegación propiamente dicha lo constituye el colapso del puente de Baltimore ocurrido tras ser colisionado por el portacontenedores “Dali”. Javier Franco, enfatiza en este punto que “el riesgo está en el núcleo de la operación marítima ya que el mar presenta desafíos únicos y significativos para el ser humano, ya que este no es su medio natural por lo que sigue siendo una aventura realmente. De tal forma, la seguridad marítima es un tema complejo y dinámico, de la mayor importancia para la industria, que requiere una atención continua y medidas coordinadas y efectivas”.
Normativas internacionales
De antaño las entidades internacionales involucradas en el sector marítimo han desarrollado estrategias para enfrentar las amenazas que surgen durante la navegación. Por ejemplo, expone el abogado, la Organización Marítima Internacional (OMI) desarrolló en su momento el Convenio SOLAS (Safety of Life at Sea), instrumento internacional relacionado con diferentes aspectos relativos a la seguridad de la actividad y de los equipos empleados con miras a garantizar la vida humana en el mar.
Por otra parte, menciona, tras los atentados del 11 de septiembre de 2001 en EE. UU., se implementó el Código PBIP (Código de Protección de Buques e Instalaciones Portuarias, también conocido en inglés como ISPS), el cual se relaciona también con las estrategias de prevención en materia de protección de buques e instalaciones portuarias.
Espacios de mejora
No obstante lo anterior, el abogado indica que existen áreas para mejorar y por ello, por ejemplo, la Organización de los Estados Americanos (OEA), ha implementado estrategias de seguridad marítimo-portuaria en distintos países. Es el caso de Guatemala, impulsó la colaboración y coordinación interinstitucional a nivel local para identificar y abordar amenazas específicas, buscando las herramientas para combatirlas, evitando la duplicación de funciones a fin de optimizar el funcionamiento del sector marítimo-portuario.
En Colombia, agrega, existe vasta experiencia en la lucha contra el narcotráfico y cada vez resulta más frecuente la adopción de nuevas medidas como las inspecciones subacuáticas antes del zarpe de las naves, el uso de drones o de escáneres, entre otras. También resultan cruciales, expone: la optimización de las comunicaciones entre la tripulación y el personal en tierra mientras el buque se aproxima a puerto, durante su estancia y en el zarpe; la revisión constante de los planes de seguridad del buque y del puerto; así como los procedimientos de seguridad y/o protección asociados al acceso de las personas a operaciones de carga y/o descarga y el uso de tecnología como escáneres para mejorar los procedimientos de inspección.
Finalmente, Javier Franco, junto con destacar la importancia de tener presente la gran cantidad de amenazas que afectan al sector marítimo, señala que “si bien existen convenios e instrumentos internacionales diseñados para luchar contra estas problemáticas, es importante que cada actor analice si resulta necesario- y/o conveniente- desarrollar buenas prácticas de seguridad y/o protección (adicionales) que además permitan optimizar la colaboración con las autoridades en la cadena logística y adoptarlas tratando de aprovechar experiencias exitosas en la lucha contra estos flagelos”.
Fuente: Mundo Marítimo